NO DEJE QUE LAS DECEPCIONES LE ROBEN LA FELICIDAD

¿Quién no se ha sentido decepcionado alguna vez ?  Hasta Dios ha pasado por esa dolorosa experiencia.  Aunque liberó a los israelitas de la esclavitud de Egipto , la Biblia  dice que ellos vez  tras vez  ponían a Dios a  prueba  y causaban dolor a  Yahvé Dios  ( Salmo, 78 , 41  )

¿Qué podemos aprender del modo de actuar de Dios  ante las decepciones ?

"El tiempo y el suceso imprevisto nos  ocurren a todos " ( Eclasiastes  9, 11 ).  Esperar con anhelo algo bueno  nos llena de felicidad  pero si no se cumple pronto  tal vez nos inunde  un fuerte sentimiento de desilusión.  Sufrimos cuando alguien nos decepciona , como cuando un  noviazgo  se rompe, un matrimonio se trunca , un hijo se rebela , un amigo ingrato,...  Nuestros propios fallos también pueden ser motivo de  decepción. 

Aunque Dios  cuidó a la primera pareja humana , ellos fueron desagradecidos  y se rebelaron (  Génesis  capitulos  2 y 3 ).  Con el tiempo su hijo Caín desarrolló una mala actitud  y asesinó a su hermano  Abel .   Pero Dios no se decepcionó, sino que  se concentró en su propósito  de llenar la  Tierra de seres  humanos  perfectos  y continuó trabajando para lograrlo ( Juan  5, 17 ).

Con ese objetivo  en mente  proporcionó el sacrificio de  Cristo ( Mateo  6, 9 ) . Dios no se concentró en el problema  sino en la solución. La  Palabra de Dios nos anima  a concentrarnos en las cosas positivas  y no torturarnos  pensando lo que podría  haber ocurrido  o deberiamos  haber hecho. 

La vida  puede cambiar radicalmente por muchas  razones . Por ejemplo podriamos  perder a nuestro cónyuge, el empleo,  la salud , la casa  o los amigos.  La mayoría de nosotros solemos  exagerar los aspectos negativos  cuando sufrimos una decepción.  Nosotros no somos un fracaso  solo porque las cosas no nos salgan bien a la primera  ( Deuteronomio  32 , 4 ) .  También es fácil que nos amarguemos cuando los demás  nos decepcionan .  Pero Dios  no  reacciona así  :   El rey David  decepcionó a Dios  cuando cometió adulterio  y luego mandó asesinar  al esposo de esa mujer.  Pese a todo , Dios vio la sinceridad del arrepentimiento  de David  y no dejó de considerarlo  su siervo. 

Las decepciones pueden considerarse como experiencias inevitables  en el camino de la vida ,  pero podemos reponernos  si tomamos medidas concretas  ( Salmo  32, 3 ).  Si nos damos cuenta de que no hemos hecho  lo que Dios espera de nosotros , tenemos que pedirle perdon , hacer cambios  ( 1 Juan  2, 1 ).  Todos nos enfrentaremos a algun tipo de decepción en el futuro.  ¿ Cómo podemos  estar preparados ?

Dios nunca nos defraudará . Nada puede separarnos del  amor  de Dios , por lo tanto podemos esperar con confianza  el cumplimiento  de la promesa  que Dios  hizo a través de  Isaias :

" Voy a crear nuevos cielos y una nueva tierra  y las cosas anteriores no serán recordadas "  Isaias  65, 17